Hoy hace 21 años la Asamblea General de las Naciones Unidas proclamó el 26 de junio como el Día Internacional de Apoyo a las Víctimas de la Tortura. En Colombia, miles de personas han sufrido desde entonces sufrimiento físico o psicológico, intencionalmente infligido, con fines de discriminación, de persecución política, de sometimiento de la población carcelaria, de represión de la protesta o como mecanismo de control social. Hasta el momento, el Estado no ha
ofrecido una respuesta satisfactoria frente a estos atentados contra la dignidad de las personas.
El comité de solidaridad con los presos políticos denuncia ante la comunidad nacional e internacional las nuevas amenazas de las que ha sido objeto, al igual que miembros de organizaciones sociales y sindicales. Estas se han venido presentando de manera constante y reiterada, señalando y estigmatizando la labor de los defensores de los derechos humanos, de las organizaciones sindicales y en general del movimiento social. Las amenazas, actuales y pasadas, se han denunciado ante la fiscalía general de la nación, sin que hasta el momento se hallen los responsables de las mismas.
Las organizaciones defensoras de derechos humanos, sociales, sindicales, ambientales y de mujeres abajo firmantes manifestamos nuestra preocupación con motivo de la amenaza recibida por parte de la “Águilas Negras”.
Según el panfleto recibido vía correo electrónico, el día 22 de mayo, se nos declara “objetivo militar” bajo la justificación absurda, anti-democrática e irracional de apoyar el programa político conocido como La Colombia Humana dirigido por el candidato a la presidencia, el señor Gustavo Petro Urrego.
fComo organizaciones de la sociedad civil que hacemos seguimiento desde el exterior a la implementación del Acuerdo de Paz en Colombia, queremos llamar la atención sobre medidas del gobierno colombiano que pueden poner en peligro la puesta en marcha del Acuerdo, principalmente en lo relacionado con la política de tierras y la Reforma Rural Integral.