Hermana de Daniel Abril, líder social asesinado, en peligro de ser víctima de un montaje judicial
Denuncias / Atención a víctimas / Construcción de paz
Nohora Stella Abril Fuentes es profesora de un colegio público de Yopal y hace parte del Sindicato de Maestros del Casanare –SIMAC. Además, es una reconocida deportista de competencia en el departamento.
Hoy, 4 de mayo de 2020, sobre las 4:30 de la tarde salió de su vivienda con la intención de comprar alimentos. Sin embargo, en inmediaciones de la zona, una patrulla de vigilancia la requirió para verificación de antecedentes. Una vez se hace efectiva la verificación, le fue indicado que existe una orden de captura vigente en su contra, la cual fue expedida en enero del presente año por el Juzgado de Támara, Casanare.
A la maestra se le acusa de porte ilegal de armas, homicidio agravado y hurto, por tanto, fue conducida al CAI del progreso y posteriormente a la Unidad de Reacción Inmediata –URI. Es importante mencionar, que los hechos por los cuales se ordena la captura, tienen fecha de septiembre de 2015, pero la orden fue emitida hasta enero del 2020.
Nohora Stella, es hermana de Daniel Abril Fuentes, líder social del Casanare, defensor de derechos humanos y ambientales, quien fue asesinado en noviembre de 2015. Hizo parte de las plataformas Voz de la Tierra, el Movimiento Nacional Víctimas de Crímenes de Estado (MOVICE), Congreso de los Pueblos, Comité Cívico por los Derechos Humanos del Meta, trabajó en conjunto con la Corporación COSPACC y con Corporación Claretiana NPB en defensa de la ecología y los Derechos Humanos. Como consecuencia de la ejecución de dichas actividades, en pro de las comunidades, sufrió detenciones irregulares y persecución, también fue enjuiciado en dos oportunidades. En el año 2007, sufrió un atentado contra su vida en el que resultaron comprometidos dos integrantes de la Brigada VXI del Ejercito Nacional, Unidad de la cual hace parte Eliecer Ansueta, soldado que fue procesado y condenado por su asesinato.
Esperamos, que a Nohora Stella se le garantice el respeto a sus derechos fundamentales y se evite, a toda costa, una detención arbitraria de lo que consideramos se trata de un montaje judicial. Recordamos que ejercer acciones de liderazgo y pertenecer a organizaciones sociales o sindicatos no son ningún delito en Colombia, y que su labor es fundamental para el bienestar de la comunidad.