Exceso de fuerza en la cárcel Buen Pastor de Bogotá
Denuncias / Cárceles
En la cárcel Buen Pastor, en la ciudad de Bogotá, se han venido presentando, desde el 18 de marzo, una serie de protestas al interior del establecimiento, exigiendo mejores condiciones sanitarias para prevenir y contener el avance del COVID – 19. Sin embargo, estas manifestaciones han sido reprimidas violentamente por parte de la guardia quienes han usado excesivamente gases lacrimógenos, afectando gravemente la salud de las internas y madres gestantes en el patio 4 y 6. Esta intervención ocasionó que internas que tenían diferentes problemas de salud tuvieran complicaciones respiratorias, sangrado excesivo y quemaduras en la piel.
El día 23 de marzo, del presente año, se realizaron operativos en cabeza del Mayor Wilson Leal, dirigidos a varias presas políticas señalándolas como agitadoras y responsables de las protestas al interior del centro penitenciario, en el operativo los agentes desorganizaron y rompieron sus cosas en sus celdas, y a su vez se manifestó que una de ellas perdería su trabajo, esto a modo de castigo por su labor de denuncia. En la madrugada del 24 de marzo, 3 mujeres sindicadas de delitos políticos fueron trasladadas, ignorando las medidas preventivas por el COVID – 19 poniéndolas en riesgo de contagio. El traslado al parecer se da a modo de represalia por sus actividades de defensa de derechos humanos.
Solicitudes
A la Subdirección de atención en salud:
1. Se le dé atención inmediata de salud a las mujeres que resultaron afectadas por los gases utilizados en el establecimiento, en especial a las que en el último mes tuvieron cirugías, a las madres gestantes y a las mujeres con enfermedades respiratorias.
A las autoridades Penitenciarias:
1. Cesar el trato hostil y humillante con las mujeres privadas de la libertad, y brindar un trato digno en especial dado que el escenario nacional y particularmente el de las cárceles es de incertidumbre y genera zozobra sobre las condiciones materiales de vida.
2. Se abra un espacio de diálogo e interlocución con las internas cuando estos escenarios de protesta ocurran, permitiendo un intercambio de solicitudes y una evaluación de las respuestas posibles ante la crisis.
3. Se les dé respuesta a las peticiones razonables de las mujeres privadas de la libertad en especial dado el contexto adverso de pandemia por COVID-19.
4. La creación de un protocolo de actuación ante escenarios de protesta penitenciaria y carcelaria, que permita tener unos lineamientos de interlocución claros.