Inician en consecuencia, dos días de huelga de hambre, cese de actividades y formación sin camisa durante la contada.

Apoyan el pliego general del Movimiento Carcelario y exigen en particular el mejoramiento de las condiciones de las visitas, consistentes en un aumento a 8 horas para la visita familiar cada ocho días y el aumento a dos horas y media de visita íntima. De igual manera, internos del Establecimiento penitenciario y carcelario de Acacías – Meta, inician acciones de desobediencia civil, consistente en una parálisis de todas las actividades dentro del establecimiento, exigiendo el respeto por la dignidad humana de las personas privadas de la libertad y denunciando ante la opinión pública el aumento progresivo y desmedido del hacinamiento en dicho centro de reclusión, donde se vienen trasladando un número importante de reclusos de otras cárceles superpobladas.

También reclaman respeto a los familiares y amigos que acuden a las visitas, exigiendo además investigaciones y sanciones frente a aquellas prácticas que configuran un irrespeto de los derechos fundamentales de quienes les vienen acompañando en su situación de privación de la libertad. Señalan que la falta de atención en salud, es también un problema sentido y grave en este establecimiento de reclusión, siendo una razón que les une al pliego general del Movimiento Nacional Carcelario y pretenden visibilizar los traslados “inconsultos y arbitrarios” de los representantes de DDHH que se han venido presentando en los últimos meses.

Los detenidos de estos centros de reclusión solicitan el apoyo a organizaciones de derechos humanos, sociales, populares, a la comunidad nacional e internacional en general, para evitar actos de retaliación en su contra, por el desarrollo de sus manifestaciones pacíficas de protesta, a las cuales acuden luego de solicitar reiteradamente soluciones a sus problemáticas que constituyen un desconocimiento de sus derechos humanos.