1 de septiembre del 2017

Desde la cárcel Picota-Erón, Bogotá, se lleva a cabo una misa en procura de sensibilizar a los altos prelados de la iglesia católica, para que intercedan ante el papa Francisco y así lograr que el Gobierno Colombiano apruebe una ley de rebaja de penas para tod@s los pres@s de Colombia.

Para los internos la aprobación de esta ley de jubileo permitiría dar solución a la grave crisis de hacinamiento que padecen todas las cárceles del país.

El hacinamiento ha llegado a tal punto que en la cárcel de Arauca el patio tiene capacidad para 90 internos, sin embargo actualmente hay más de 200 internos, esta situación hace que las condiciones de reclusión sean inhumanas.

Por esta razón los internos de todo el paús piden al Gobierno Nacional realizar una ley de jubileo que sea aplicable a todos los delitos, a propósito de la llegada del papa a Colombia.

“Todos somos presos,  pero primero somos seres humanos  que merecemos una segunda oportunidad de vida” Aseguró uno de los internos.

Para los internos es importante poder revelar a la sociedad colombiana en su conjunto la realidad que viven todos los internos en las cárceles del país, pues debido al hacinamiento las cárceles se han vuelto en lugares de castigo y tortura.

“Hay internos que mueren  por falta de medicamentos,  pero estos sucesos el estado Colombiano no los publican por los medios de comunicación, porque les da vergüenza  la realidad de las cárceles de COLOMBIA” Señala uno interno.

Por último hacen una invitación directa a todas y todos aquellos que quieran acompañarlos este próximo 3 de septiembre a una vigilia por la libertad que se llevará a cabo a las afueras de todos los centros penitenciarios y carcelarios del país.