Expresamos nuestra gratitud a la ONU por impulsar el Acuerdo Final para la Terminación del Conflicto y la Construcción de una Paz Estable y Duradera.
Denunciamos que los días 10 y 11 de septiembre la Policía Nacional una vez más reprimió el derecho a la protesta social, realizó acciones de perfilamiento y agredió a los defensoras y defensores de derechos humanos.
Expresamos rechazo a las manifestaciones estigmatizantes y criminalizantes que deslegitiman la movilización social.
Esta iniciativa legislativa si bien representa un gran avance para la reparación a las víctimas del conflicto armado colombiano, no puede desviar su objetivo para incluir disposiciones que puedan afectar los derechos y garantías de las víctimas y poner en riesgo la restitución formal y material de los predios, así como el goce efectivo del derecho a la Verdad, la Justicia, la Reparación y la No Repetición.